Sin importar el tipo de trabajo que realicemos, siempre vamos a necesitar ideas y soluciones para resolver determinada situación, es por esto que la creatividad juega un papel decisivo en nuestras vidas y debemos mantenerla en constante actividad para evitar los temidos bloqueos.
No se trata tanto de evitar los bloqueos de creatividad, sino de saber cómo reaccionar ante ellos y no quedarse estancado, cosa que puede resultar un problema si tienes que estar creando nuevas ideas para cumplir con una meta.
Por suerte, hay maneras comprobadas que ayudan a salir del bloqueo creativo, aquí te mostraremos una lista de 7 infalibles:
Anota tus ideas.
La primera recomendación tal vez parezca un poco obvia, sin embargo es una de las técnicas más efectivas para generar ideas y retomar el control de tu creatividad.
Cuando pensamos y pensamos en soluciones, a veces caemos en un círculo donde no logramos ninguna resolución, es aquí cuando anotar las ideas claves y estudiarlas, nos permitirá ver en contexto si estamos cerca de la solución o si se nos pasó algo por alto.
Cambiar de formato es una buena manera de reconocer fallas, por ejemplo: si estamos pensando en algo y lo escribimos, podemos detectar dónde está el problema. Por otra parte, hablar también ayuda a darle estructura a una línea de pensamientos sin sentido.
Si leemos mentalmente, tal vez se nos pasen algunos errores tipográficos, por eso los editores leen en voz alta, de atrás hacia adelante, etc., para puntualizar fallos gramaticales o de redacción.
Prioriza tus tareas.
¿Qué es lo más importante que debes hacer?
Priorizar tus tareas te permitirá empezar a resolver lo más importante y es algo fundamental para el buen manejo del tiempo.
Divide tus tareas, clasifícalas y desarróllalas, solo así verás cómo se dispara tu productividad y rendimiento.
Decirlo es muy fácil, pero hacerlo es algo muy diferente. Entonces ¿Cómo puedes lograrlo?
Empieza por establecer:
– ¿Qué beneficios tiene esta tarea?
Todas, absolutamente todas las tareas debemos evaluarlas en función de su beneficio, ya sea laboral o personal.
– ¿Cuál tarea es más urgente y cuál puede esperar?
Cuándo todo es urgente, hay que decidir qué realmente lo es y qué no.
El criterio de la urgencia es importante aplicarlo para saber por dónde empezaremos a resolver lo que debemos hacer.
– ¿Cuál es el objetivo de cada tarea?
Hay tareas intrascendentes y otras que no lo son. Por eso debemos priorizar basándonos en los objetivos de cada una y si están ligadas directamente a metas o procesos.
Muchas veces la misma cantidad de tareas son las que hacen que las personas se bloqueen, así que priorizar acabará con este problema.
Haz un cronograma.
Los cronogramas nos dan estructura y organizan nuestro tiempo en bloques de tiempo, así podemos saber la cantidad de horas que le dedicaremos a cada tarea.
Como dijimos al principio, los bloqueos creativos ocurren sin importar el tipo de trabajo que realices y así mismo los cronogramas funcionan para todo tipo de personas, ya que sirven como guía o referencia para cumplir con ciertos objetivos.
Usa menos herramientas.
Tener demasiadas opciones, en el caso de la creatividad, puede ser negativo.
Actualmente, todos tenemos acceso a cientos de herramientas que nos permiten ser más productivos en el ámbito laboral y personal. Pero estas herramientas son inútiles si no contamos con un sistema que soporte su uso. ¿Qué queremos decir con esto? Sencillamente; hay tantas herramientas disponibles, que podemos pasar horas navegando para conseguir la que más nos convenga, evitando que nos pongamos a trabajar realmente.
Evitar o procrastinar, es uno de los peores enemigos de la creatividad, y por esto es que para reaccionar efectivamente ante los bloqueos creativos, debemos enfocarnos en desarrollar habilidades y no en usar más herramientas.
Las habilidades son útiles y efectivas, además nos dejan comprender cualquier tipo de sistema o herramienta, mientras que la herramienta por sí sola, no hará mucho por nosotros.
Establece metas.
Establecer metas te motiva a tomar acciones.
Las metas sirven como señuelos mentales que activan nuestro enfoque y cuando nos enfocamos, naturalmente dirigimos nuestra atención hacia el siguiente paso y así sucesivamente hasta llegar a la meta. En este caso, tu cuerpo seguirá tu mente hasta conseguir el objetivo final.
Además, el progreso siempre resulta adictivo y si vemos que estamos logrando hacer todo lo que nos proponemos, siempre querremos seguir avanzando.
Pero quizá lo más importante de establecer metas, es el saber que puedes cumplir con ellas y reconocerte y ser reconocido como una persona efectiva y eficaz.
Observa y escucha.
Para lidiar con el bloqueo creativo y continuar generando ideas, tal vez debas ir a donde estén las ideas y no esperar que vengan hasta ti.
Sal, escucha y observa tu entorno. Estas simples acciones te darán perspectiva y crearán un nuevo abanico de alternativas que pueden ayudarte a resolver o lidiar con un problema.
No planees tanto ¡Hazlo!
Finalmente, cuando pasamos demasiado tiempo pensando en hacer algo, en vez de sentarnos y hacerlo, creamos una imagen de la dificultad del problema que nos impide avanzar.
La solución está en hacer las cosas, empezar por cualquier parte, mientras lo hagamos para progresar en vez de quedarnos estancados pensando en escenarios que tal vez nunca lleguen a suceder.
Todos tenemos días de mucha inspiración y otros días en que las ideas se esconden cuando nos ven, es en estos días cuando debemos aplicar ciertas técnicas para cumplir con nuestros objetivos y conseguir el mejor de los resultados.